GENERAL JAMES (O DIEGO) PAROISSIEN
James Paroissien, citado en América del Sur
como Diego Paroissien (Essex,Inglaterra, noviembre
de 1781 – † en alta mar, 1827), médico inglés que tuvo una
destacada actuación en el proceso de la Independencia de la Argentina,
de Chile y del Perú.
Nació en Harking (Essex), Inglaterra, de ascendencia
francesa hugonote y murió en el mar, en viaje de América a Valparaíso.
Médico británico que jugó un papel prominente en el
movimiento de la independencia Argentina. Recibió una buena educación general,
especializada en el campo de la cirugía y también en el estudio de la
química.
Su nombre original era James Paroissien, y descendía de
lejanos antepasados de origen protestante francés. Se doctoró en medicina
en 1806.
Al recibir la noticia del éxito de las Invasiones
Inglesas al Virreinato del Río de la Plata, se embarcó como parte de
la expedición que debía reforzar esa conquista. Cuando llegó allí, la ciudad
de Buenos Aires había sido reconquistada por su propia población;
asistió a la captura de Montevideo, donde se instaló como médico y
comerciante. Cuando, tras el nuevo fracaso en Buenos Aires, los ingleses
abandonaron también Montevideo, se embarcó hacia Río de Janeiro.
En el Brasil se encontró con Saturnino
Rodríguez Peña, un criollo que había colaborado con los invasores a
Buenos Aires, que lo unió al proyecto carlotista, de coronar a la
princesa Carlota Joaquina de Borbón como reina – o al menos como
regente – del Río de la Plata, en reemplazo de Fernando VII, prisionero
de Napoleón Bonaparte. Carlota era la esposa de Juan VI de Portugal, que
estaba instalado en Río de Janeiro.
Viajó a Buenos Aires como jefe de una comisión
exploradora minera enviada por la compañía británica "La Potosí, La Paz
and Peruvian Mining Association".
Sin embargo, es casi seguro que su misión era de
espionaje a favor de las posibilidades del carlotismo o de una tercera invasión
inglesa.
Al llegar a Montevideo fue reconocido y arrestado por el
gobernador Francisco Javier de Elío, que se apoderó de las cartas de Carlota
para sus simpatizantes en Buenos Aires. Acusado de alta traición, fue procesado
con pedido de ejecución.
Cuando llegó al Río de la Plata el nuevo
virrey, Baltasar Hidalgo de Cisneros, fue trasladado para su
enjuiciamiento a Buenos Aires. Consiguió que Juan José Castelli se hiciera
cargo de su defensa, y poco tiempo después, al estallar la Revolución de
Mayo éste fue elegido miembro de la Primera Junta, Paroissien
recuperó rápidamente la libertad.
Acompañó al Ejército del Norte en
la primera expedición auxiliadora al Alto Perú como cirujano, y
presenció las batallas de Cotagaita, Suipacha y Huaqui como
médico y secretario personal de Castelli.
Durante la retirada que siguió a la derrota, ayudó
a Juan Martín de Pueyrredón en la evacuación de los caudales de la
Casa de Moneda de Potosí.
El Triunvirato lo nombró jefe de la fábrica de
armamentos de la ciudad de Córdoba, con el grado de teniente coronel de
artillería.
La Asamblea del Año XIII, por recomendación de
Pueyrredón, le concedió una de las primeras cartas de ciudadanía de
las Provincias Unidas del Río de la Plata.
En abril de 1815 estalló la fábrica de pólvora,
causando varios muertos. El gobierno local lo consideró responsable del
accidente y se inició una investigación para procesarlo. Pero en ese momento
estaba avanzando el federalismo en Córdoba, lo que le dio la
oportunidad de retirarse a Buenos Aires. Allí formó parte del estado mayor
general del ejército del Director Supremo Álvarez Thomas.
En el transcurso de los tres años de actuación en ella
(1812-1815), Paroissien comenzó su colaboración con José de San Martín, en el
plan de este último para la liberación continental, que fue tomando forma
durante la convalecencia de San Martín en Córdoba, en 1814. La explosión de la
fábrica de pólvora, en abril de 1815 hizo que Paroissien regresara a Buenos
Aires, donde integró el estado mayor general y fue designado, en septiembre de
1816, para acompañar el batallón a Mendoza como cirujano jefe para asumir la
responsabilidad de los servicios médicos del ejército de los Andes.
En la batalla de Chacabuco, Paroissien combinó nuevamente
la función militar con la de su profesión de médico, desempeñándose como edecán
del general Miguel Estanislao Soler; recibió elogiosos conceptos del general
San Martín por su meritoria actuación. Fue miembro fundador de la Legión del
Mérito de Chile, siendo designado cirujano cirujano mayor del Ejército de
Chile. Instalado en Santiago de Chile, fue nombrado y fue miembro fundador
de la Legión del Mérito de Chile.
Tuvo un serio altercado con el general Miguel
Brayer, el ex oficial de Napoleón que causaría un desastre con su ataque a
Talcahuano, y que sería dado de baja por pedir licencia minutos antes de una
batalla.
Después del Desastre de Cancha Rayada asistió
al general Bernardo O’Higgins, pero regresó al ejército para asistir a San
Martín como oficial de estado mayor y también ejercer como cirujano en
la Batalla de Maipú. Por su heroico comportamiento en este combate fue
ascendido al grado de coronel y premiado con un valioso y amplio terreno
irrigable en Mendoza.
Samuel Haigh ha dejado un vívido relato de los servicios
prestados por Paroissien en el hospital de campaña luego de la victoria de los
patriotas en Maipú. La breve nota del cirujano enviada a O'Higgins proporcionó
a la capital chilena la primera noticia de esa gran victoria.
Como resultado de sus acciones en Maipú, Paroissien fue
Promovido al grado de coronel, se le confirió la medalla de oro de Maipú,
otorgándosele asimismo un extenso predio en Mendoza. Como uno de los
principales ayudantes de San Martín, se embarcó con la expedición libertadora
con rumbo al Perú, en agosto de 1820.
Se embarcó en la Expedición Libertadora del
Perú como médico jefe y como edecán de San Martín. Acompañó al general en
su entrevista con el virrey José de la Serna, que él mismo gestionó, y
posiblemente fue el autor de la idea de implantar en
el Perú una dinastía de origen español. Fue premiado con
la Orden del Sol y ascendido al grado de general de brigada.
Tras la toma de Lima y la Declaración de
Independencia del Perú, fue enviado junto a Juan García del Río en
misión diplomática a Chile, Buenos Aires y Europa, para gestionar el
reconocimiento de esa independencia, y posiblemente conseguir un rey para
coronar en el Perú. No obtuvieron ningún resultado de sus gestiones en Buenos
Aires, donde fueron humillados por la actitud prescindente del gobierno del
ministro Bernardino Rivadavia. Al llegar a Londres recibieron la
noticia de la renuncia de San Martín al gobierno peruano, lo que hacía inútil
su presencia allí. No obstante, Paroissien se quedó en Londres, donde recibió a
San Martín en la primera etapa de su exilio y le consiguió alojamiento.
Regresó al Perú, donde se puso a órdenes de Simón
Bolívar y acompañó al general Sucre en su entrada al Alto
Perú. En abril de 1825 fue nombrado director de minería del gobierno
peruano, con la misión de organizar las minas de Potosí.
A fines de ese año volvió a viajar a Europa, para
realizar consultas con especialistas y organizar la concesión de las minas de
Potosí a alguna empresa europea. La independencia de Bolivia hizo
inútil sus gestiones, por lo que regresó a ese país y fue nombrado director de
minería por el presidente Sucre. También proyectó un canal que debía unir
el Océano Pacífico con la cuenca del río Amazonas, y por ésta al Océano
Atlántico.
Su empresa minera quebró a fines de 1826 y perdió todos
sus bienes, incluidos los terrenos concedidos por San Martín en Mendoza, como
premio a su actuación en Maipú.
Se embarcó en septiembre
de 1827 hacia Valparaíso, pero falleció en el viaje hacia esa
ciudad, donde fue sepultado.